FILOSOFÍA

  La vida es un proceso de aprendizaje a veces duro, pues a menudo las situaciones no salen como uno esperaba o imaginaba y solemos arrepentirnos de lo hecho, y lo llamamos “errores” del pasado. Desgraciadamente la vida no te da la oportunidad de volver atrás, y si lo hiciera ya no seríamos nosotros mismos. Con ello quiero decir que hay que entender que en ese momento, bajo esas circunstancias se tomaron una serie de decisiones, y si volvieras para atrás, lo volverías a hacer si no sabes lo malo que va a desembocar…, y en el caso de que pudieras volver con el conocimiento del presente, en ese momento “futuro”.. ¿qué harías?, ¿y si otra decisión te genera otro tipo de dolor? Viviríamos con miedo, y nunca creceríamos como personas, como se crece cuando se supera un problema.

Este es el primer paso, NO RECRIMINARNOS NADA, pues al hacerlos estamos “machacando” sistemáticamente nuestra autoestima. La vida es un proceso y las cosas vienen y van, y lo que antes era bueno las circunstancias han podido hacer que ahora no nos resulte así, simplemente lo dejamos fluir y seguimos nuestro camino. “NO ES UN FRACASO, ES EL FINAL DE UN PROCESO”.

Sin embargo cuando se adquiere un compromiso consentido de generar una familia, se sabe que es para toda la vida, pues igual que nosotros como hijos “siempre” hemos necesitado que nuestros padres estuvieran ahí, ellos también van a contar con nuestro apoyo incondicional siempre. Es un derecho y obligación moral de padres e hijos, apoyarse como familia.

Se entiende que es un tema muy amplio y que, al generalizar, posiblemente deje muchos casos fuera de esta filosofía.

La solución surge del problema, de la necesidad, es por ello que un grupo de personas con estas dificultades, concretamente de Málaga hayan constituido la Asociación “Custodia Compartida Málaga: por los Derechos del Menor y de la Familia”.

Nace de la absoluta convicción de que, a igualdad de condiciones y como norma general, el menor tiene derecho a estar el mismo tiempo con su mamá que con su papá, cree firmemente en la igualdad de sexos, y que ambos roles pueden desempeñar la tarea de cuidado, educación y protección del mismo.

Nuestra reivindicación y lucha surge, a modo de reactancia positiva, cuando los niños y las niñas son apartados de sus padres, total o parcialmente, violando sus derechos, los de los padres y los de la familia de este.

La Asociación considera que la “custodia compartida” debería de ser el punto inicial de partida en una ruptura de pareja. Si miramos desde el punto de vista del menor, deberíamos de juzgar a ambos progenitores por igual, no solamente con cosas materiales, bienes, formación, etc.. sino desde punto de vista emocional y afectivo del menor.

Evidentemente una madre o un padre que no quiera hacerse cargo de su hijo, consideramos que no debe hacerlo, un niño no debe verse como un castigo o una carga para ningún progenitor, no creo que nadie sea una buena madre obligada a serlo, o un buen padre. Pero si ambos progenitores quieren ejercer como padres están en el mismo derecho de poder hacerlo en igualdad “real” de condiciones.

La personalidad de los niños es clave para el éxito del desarrollo de la “custodia compartida”, en mi opinión, no debemos valorar o juzgar si un niño, madre o padre esta capacitado para optar a la “custodia compartida”, deben de ofrecérsele las herramientas para que bien los padres o el menor se encuentren en la mejor disposición de afrontar este cambio.

En mi opinión un equipo de intervención social, compuesto por trabajadores sociales, educadores y psicólogos deberían tratar de conseguir que entre los padres:

  • Mantener el respeto y cierta aprecio hacia la ex-pareja así como su círculo próximo(niños de otras parejas, otra pareja, familiares, etc..), y sobretodo delante del menor, al menos como familiar de su hijo/a. Olvidando los rencores y disputas que se tuvieron como pareja. (ODIAR PARTE DE LO QUE TU HIJO/A QUIERE ES ODIARLE TAMBIÉN A ÉL)

  • Empatizar con los niños y la otra parte.

  • Mantener siempre abierta de la custodia compartida, descarga y asunción de responsabilidades por ambas partes.

  • Tratar de establecer nuevos roles, responsabilidades, tareas en la nueva situación, siempre primando el bien del menor.

  • Ser flexible y estar abierto a ayudar, mejora la autoestima.

  • Creer que la otra persona es buen padre/ madre.

Esta demostrado que en condiciones generales la custodia compartida es la mejor opción tras la ruptura de pareja. Muchas gente piensa en seguir como sea por los menores y no se dan cuenta que a veces es mejor romper la pareja si el ambiente es negativo y perjudicial, pues los niños no deben de escuchar los problemas de los mayores.

La ruptura, los cambios, viajes etc.. ¿son buenos para los niños? A ver… no hay nada ni bueno ni malo, son circunstancias… ¿acaso es eso peor que aguantar broncas todos los días, discusiones, gritos, etc..? La vida es como es y de las situaciones difíciles, bien supervisados se pueden sacar experiencias muy interesantes. En mi opinión, una ruptura es una oportunidad de superación, en muchas ocasiones se convierte en una especie de educación “bi-culturalista”, puesto que se adquieren distintos patrones, valores, comportamientos, etc.. y jamás debemos entrar a valorar si uno es mejor que otro, simplemente son diferentes. La educación precisamente es eso, enseñar para que los niños puedan ser responsables y que puedan tomar libremente sus decisiones.

En ocasiones debemos priorizar, hay que analizar las circunstancias y ajustarnos constantemente a estas. Todos queremos lo mejor para nuestros/as hijos/as, pero en ocasiones una educación estricta no es lo más adecuado. Si, por ejemplo una persona pasa poco tiempo con su hija, no tiene que centrar su visita en enfados, castigos etc.. porque esta no hace algo como este quiere, en mi opinión es un camino equivocado. Nuestras mejores armas van a ser el AMOR, la PACIENCIA y la CREATIVIDAD, siempre hay canciones, dibujos, y mil cosas que se nos pueden ocurrir para que lo consiga hacer y realmente interiorizar con amor lo que se pretende, en lugar de imponer.

Los niños son tremendamente ABIERTOS, FLEXIBLES y CREATIVOS..

 ¡¡APRENDAMOS DE ELLOS!!

¿Para qué es buena la Custodia Compartida?

  • Mantiene la relación con ambos progenitores.
  • Reduce el conflicto familiar
  • Refleja el interés mutuo entre padres e hijos por mantener el vínculo.
  • Implica que los niños tienen que hacer ciertos compromisos.
  • Mejora la calidad en la relación paterno y materno-filial
  • Incentiva el desarrollo de planes de pareja.
  • Resulta una consecución lógica tras la decisión judicial.
  • Se reduce la alienación parental.
  • Ambos progenitores tienen las mismas responsabilidades.
  • Es la mejor forma de proteger los intereses del menor
  • La justicia salvaguarda la autoridad parental, la igualdad, los eventos vitales y las responsabilidades.
  • La mejor recompensa para los intereses del niño.
  • Custodia Compartida como Base y Principio en cualquier ruptura

Respetamos todas las opiniones, pero este es el sentir general de esta Asociación, y de esta Filosofía se impregnan los Estatutos, Reglamente Interno, Servicios y Actuaciones.

Rechazamos abiertamente cualquier manifestación de violencia psicológica, física, emocional… y a cualquier persona que la profese, la cual no tendrá representación en esta Asociación, ni mucho menos representará a la misma.

Al asociarse, una persona no solo asume que comparte estos principios, sino además crea un compromiso con la misma en su modo de pensar y hacer, en completa integridad con la misma Asociación.

F. Chapado (Sep/2014)