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Este domingo, se ha realizado el acto de “Mamás y papás por la Custodia Compartida” en calle Larios, estrenando un roll-up, que atraía todas las miradas, amén de un muñeco con la camiseta de “Custodia Compartida”, que servían de reclamo a los curiosos para acercarse y ser informados por la Causa.

En virtud a esta iniciativa, son ya diversas personas que se han puesto en contacto a través de distintos medios para interesarse por la Defensa de la Custodia Compartida e incluso para asociarse con nosotros.

Los padres separados malagueños se han concentrado en la calle para de nuevo reivindicar la aplicación como norma del régimen de custodia compartida tras una separación o divorcio. 
No se pretende sustituir la aplicación de la custodia materna impuesta que en actualidad dictaminan sus Señorías (la inmensa mayoría, pocas por desgracia son excepciones, y de las pocas una como castigo se ha llevado 10 años de inhabilitación), mediante la cual declaran huérfanos de padre vivo a diario a miles de niños cuyo único pecado cometido es el de tener unos progenitores que han decidido romper una convivencia en común. 
Unicamente se pretende, que bajo ese interés superior del menor o ese «favor filii» (el cual aparece en todas las sentencias), se analice cada caso concreto, y se intente acordar la solución que menos perjudique a los menores, los cuales cuando sus padres conviven juntos en acuerdo, desde el mismo instante de su nacimiento crecen en custodia compartida.
La actual ley desde hace ya no más de un par de décadas no condiciona al juez a imponer la custodia materna, pero, sin embargo, sus Señorías bajo una sistemática machista judicial deciden imponer la custodia materna desde incluso antes de entrar a la vista.
Actúan como robots, programados por el mandamiento del feminista que establece que los hombres o han de encontrarse sometidos al criterio o capricho de la mujer o se verá en la ruina económica y emocional, pues el daño que se produce contra el verdadero padre destroza el estado emocional del padre como si de un cáncer terminal en estado puro se tratase. El padre se encuentra no sólo impedido a ejercer sus obligaciones parentales de amparar, criar y educar a sus hijos, sino que además ha de presenciar como ante sus narices y financiado por el mismo, se destroza la infancia de sus hijos quienes se crían bajo unos valores machistas que enseñan por la vía de los hechos a los menores que la madre es la encargada del cuidado de los hijos y el hogar, y el padre es el sustento económico que sólo sirve para visitar. Ellos solos aprenden la incapacidad de la figura paterna a la hora de intentar corregir acciones propias en los menores como de su corta edad e inmadurez, pues comprueban que el alcance del padre se encuentra limitado exclusivamente a las vacaciones,de ahí que el fracaso escolar en los hijos de padres separados sea tan acusado, y los centros de menores se encuentren plagados por hijos de padres separados (esconden el dato de que ambos patrones se producen bajo la custodia materna).

Gracias a tod@s por participar!!! juntos seguimos caminando.

Figura 1. Asociados ofreciendo información a los ciudadanos

Figura 2. Asociado ofreciendo información a los papis y mamis.

Figura 3. Cómo algunos no podíamos ver a nuestros hijos, nos llevamos muñecos.

Éxito total en terapia de grupo

Una de las principales funciones que tiene la Asociación es la de crear calor y apoyo entre nosotros, para formar una gran familia. Mediante una dinámica se ha puesto sobre el candelero un tema de debate que ha servido a cada uno para expresar sus propias experiencias.

Uno de los puntos álgidos ha sido cuando un compañero ha manifestado que no tenía para hacer la compra para el fin de semana que venían sus hijos, de forma espontánea y natural todo el mundo ha empezado a contribuir con lo que buenamente podía. Ha sido muy humano, bonito y emotivo. Me siento orgulloso de pertenecer a esto.

Esta tarde compañeros de la Asociación han ido al encuentro de «Menores ni una gota«, para preguntar a Rocío Ramos-Paúl, cómo puede ejercer un padre su co-responsabilidad parental cuando apenas puede ver a su hijo.

Figura 1. Asociado reivindicando con su camiseta en pleno acto de «A los menores ni una gota»

Figura 2. Foto del cartel del acto de «A los menores ni una gota»

Algunos socios que pertenecen al Grupo de Ocio de la Asociación Custodia Compartida Málaga: por los Derechos del Menor y Familia, se disfrazan en la «NOCHE EN BLANCO» para ser la foto más votada y conseguir fondos para la Asociación.

Figura 1. Miembros de la Asociación posando como ganadores del 1º premio de disfraces de «LA NOCHE EN BLANCO»

Hace algunos años, para algunos más que para otros, apenas nos importaba la política a muchos de los afectados que componen esta Asociación. Ayer sin embargo, domingo 20 de diciembre, TODOS fuimos con la ilusión de CAMBIAR las cosas. Tratar de recuperar la dignidad y recuperar lo que se nos ha arrebatado. Poca gente se mueve si le quitas algo de dinero con impuestos, subes el IVA, la gasolina, e incluso si le dejas sin trabajo o se lo pones muy difícil… Pero ningún padre o madre de “bien” se queda impertérrito mientras ve como le arrebatan a sus hijos. Siendo conscientes además de que a su vez les estamos generando un daño irreparable, y que ese tiempo jamás nos será devuelto.

Ayer salimos a votar, con camisetas, acompañados de nuestros hijos los que pudimos, y otros compañeros con sus hijos también, pero dentro del corazón, puesto que son muchas “lunas” sin las cuales no pueden contar con su compañía. Cada uno votaba con ESPERANZA, ILUSIÓN, de que alguna de las promesas hechas, no se rompan en mil pedazos como lo han hecho tantas veces, casi rezando para que le importemos algo a alguien y se nos escuche.

Para mi da igual el resultado, ayer, como siempre entre nosotros, GANÓ el AMOR, el amor que sentimos a nuestros hijos, y que jamás lograrán arrebartárnoslo. ¡No!, seguiremos unidos, le pese a quien le pese, apoyándonos mutuamente, para recordárnoslo.

Figura 1. El presidente de CC_Málaga ejerciendo como modelo para su hija al ejercer el derecho al voto

Figura 2. El tesorero de CC_Málaga ejerciendo como modelo para su hija al ejercer el derecho al voto

Figura 3. Asociado ejerciendo su derecho al voto

Figura 4. Asociado ejerciendo su derecho al voto

Figura 5. Asociado ejerciendo su derecho al voto

Figura 6. Asociado ejerciendo su derecho al voto

Figura 7. Asociado de CC_Málaga ejerciendo como modelo para su hija al ejercer el derecho al voto

El pasado domingo 8 de febrero, en el meeting de Susana Díaz en Antequera, me acerqué con la Vocal de la Asociación, Asunción Vives y mi hija Lucía Chapado, con intención de darle una carta a la Presidenta de la Junta de Andalucía. Quise ir con ambas, puesto que Asunción es la Delegada de Prensa y Relaciones Políticas, y mi hija en representación de todos los niños de padres divorciados que padecen las desigualdades del Sistema Judicial.

Lucía con tan solo 3 años de edad lo tenía muy claro, al acabar el meeting, se acercó a la Presidenta de la Junta y le dijo lo que a mi me dice cada día al volver a casa de su madre… “Susana… quiero estar más tiempo con papá“, y acto seguido le dio el sobre. Este hecho cautivó todas las cámaras y televisiones que se volcaron en ella. Sinceramente, estaba tan sorprendido y emocionado, que no podía articular palabra, me miraba Susana y solo se me encharcaban los ojos, hasta que finalmente pude decirle: “Soy el Presidente de Custodia Compartida Málaga, por los Derechos del Menor y Familia, y por esto, por nuestros hijos es por lo que estamos trabajando, léase la carta y concédanos una entrevista.“

Posteriormente Asunción Vives quiso volver a insistirle, y al recordárselo, ´ésta le enseñó la carta, prometiéndole que se la leería.

Nos volvimos para casa con la satisfacción de haber cumplido nuestro objetivo y despertado el interés por los medios de comunicación. Pero aún más lo estaríamos al día siguiente cuando la noticia fue recogida por medios como el SUR.

Figura 1. Susana Díaz con nuestra vocal Asunción Vives

Figura 2. Portada del Sur, donde destaca la entrega de la carta de Lucía a Susana Díaz

En la provincia, sólo el 5 por ciento de los divorcios acaban con la implantación de esta medida.

Muchos niños llegaron del colegio esta semana a sus casas cargados con pequeños regalos que ellos mismos habían hecho en clase para sus padres. Era su día y había que celebrarlo. Sin embargo, no fueron todos, ya que a algunos progenitores no les coincidía con el régimen de visitas impuesto por el juez después de la ruptura con la que fue su pareja. Una treintena de ellos aprovechó la ocasión para luchar por la custodia compartida y se concentraron ante la Ciudad de la Justicia para exigir que esta medida deje de ser una excepción. Y es que pese a que el Tribunal Supremo avala esta forma de proceder tras una separación y los magistrados malagueños también la defienden, lo cierto es que la guardia y custodia compartida es una opción minoritaria.

La prueba está en las cifras. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística sobre esta situación, que se refieren a 2013, solo 194 de las parejas que se divorciaron en Málaga compartieron la custodia del menor, lo que representa un 5,4 por ciento del total de rupturas. De hecho, pese a la voluntad transmitida desde la Justicia por impulsar esta resolución cuando se acaba el matrimonio, lo cierto es que se ha producido una regresión desde 2008, cuando el porcentaje de parejas que accedieron a un régimen de corresponsabilidad sobre sus hijos fue del 9,6 por ciento, es decir, casi el doble que la última cifra que se conoce.

Después de 18 años en los Juzgados de Familia de Málaga y de haber divorciado a 15.000 parejas, el juez José Luis Utrera conoce bien esta realidad. Al respecto, explica que, pese a la voluntad de promover la custodia compartida como la mejor fórmula para el menor, la sociedad aún no la tiene interiorizada. Por ejemplo, el magistrado insiste en que muchas mujeres se sienten señaladas si no consiguen o luchan por la custodia monoparental.

El responsable de Familia del Colegio de Abogados de Málaga, Juan José Reyes Gallur, asegura que la sociedad tiene aún una visión machista en la que piensa que el padre no está igual de capacitado que la madre para cuidar del pequeño. «Es algo que hay que cambiar», apunta.

De hecho, antes de llegar a juicio, muchos de los progenitores pactan la custodia monoparental. El decano de los abogados malagueños, Francisco Javier Lara, afirma que esto se produce así por el temor de ir a juicio, ya que si no hay acuerdo para la custodia compartida por ambas partes, será muy difícil que sea el padre quien la obtenga. «Acuerdan que la custodia la tenga la madre con unas condiciones de visita mucho mejores que las que, si no hay acuerdo, serán fijadas por el juez en sala. Sabe que si va a juicio lo tiene muy complicado», añade Lara.

El acuerdo

Es una realidad que se aleja de las intenciones respaldadas por el Supremo. También por los magistrados de los Juzgados de Familia, que se muestran favorables a la guardia y custodia compartida. De hecho, Reyes Gallur cuenta que, antes de empezar los juicios, los magistrados y los fiscales suelen defender que se intente llegar aun acuerdo en este sentido.

Es una postura que también defiende el decano de los abogados. Lara insiste en que otorgar la guardia y custodia compartida debería ser la norma y no una excepción. En este sentido, señala que la ruptura entre dos adultos no tiene que suponer la de un hijo y su padre.

Asegura que las partes deben estar en igualdad de condiciones tras una ruptura de la pareja y hacerse cargo de los hijos menores. «Tiene que haber un acuerdo en este aspecto, es indispensable, luego lo económico ya es otra batalla», señala.

Utrera, pese a que aboga por aplicar esta medida tras una ruptura, insiste en que hay que estudiar cada caso. Los magistrados deben tener en cuenta numerosos factores antes de fallar, como evaluaciones psicológicas de los padres, si hay incapacidades parentales, las relaciones de apego y luego decidir cuál es el sistema más adecuado.

La guardia y custodia compartida no es la única solución. Para Utrera lo más importante no es el régimen sino la coparentalidad responsable. Es decir, que los progenitores estén implicados en el cuidado y la educación de sus hijos.

Figura 1. Asociados de Custodia Compartida Málaga posan con su pancarta frente al Palacio de Justicia

Nuestros principales objetivos son lograr un cambio de las leyes, sacar a la luz el drama de estos progenitores y la prevención.

Fernando Chapado ha tomado las riendas de esta entidad malagueña con el único objetivo de encontrar justicia para los padres que, como él, se sienten totalmente discriminados por la justicia. El presidente cuestiona el concepto de igualdad y el aislamiento al que se ven sometidos socialmente

Fernando Chapado llega a la sede de Custodia Compartida Málaga cargado de juguetes usados que ha conseguido reunir a través de varias donaciones para que algún padre arruinado pueda tener un detalle con el hijo que apenas puede ver. Un dibujo infantil por pared dan algo de calor al local que desinteresadamente les ha cedido un particular al que por ahora no pueden pagar ni la luz. Su objetivo como presidente es levantar la asociación, venida a menos después de que fuera creada en abril de 2011 por un grupo de padres desesperados que a veces actuaban con más corazón que cabeza.

Fernando, psicólogo y profesor de Ciencias de la Educación, se disculpa. Prefiere no contar su caso por respeto a sus compañeros. No quiere personalizar, pero reconoce que decidió coger las riendas de la organización en septiembre pasado después de dos años en el «infierno». Así define el periplo que suele comenzar cuando una mujer intenta por todos los medios que un padre no vuelva a ver a sus hijos sin una razón de peso. «¿Qué educación va a recibir un crío cuya madre le impide ver a su padre y lo manipula constantemente?», pregunta antes de condenar absolutamente la violencia y describir el patrón de la mayoría de los 28 socios que son actualmente, cinco de ellos mujeres, entre los que hay desde policías hasta comerciales, aunque les consta que por su situación pasan hasta jueces. Lo normal, dice, es que todo empiece con una denuncia por malos tratos motivada por el despecho. «Aunque sea mentira, en el proceso de esa denuncia lo pierdes todo, hasta el trabajo en el peor de los casos. Puedes pasar por el calabozo y después tienes que pagar una pensión, la hipoteca del piso que no puedes disfrutar y la manutención. Y si no pagas todo porque no puedes es delito», explica Chapado antes de buscarle sin éxito el significado a la palabra igualdad que tanto suena en los medios de comunicación. No le gusta hablar de dinero, pero es un tema inevitable que impide a muchos padres ir al cine o al fútbol con sus pequeños durante las escasas horas que los ven. «No es justo que una madre ponga el precio de la custodia antes de firmar», asevera.

A Fernando le llama mucho la atención cómo el lenguaje se «generaliza» según el género. «Me da mucha rabia que la gente me diga que parezco una madre cuando hablo de mi hija. O que la palabra amor siempre se asocie a la maternidad y la violencia a la paternidad. Si queremos igualdad hay que acabar con los anacronismos y con una ley que consideramos totalmente injusta. La mujer maltratada tiene amparo en la justicia, pero ¿qué pasa si te maltrata la justicia?», abunda emocionado.

Contra todo esto, el presidente de Custodia Compartida Málaga se plantea tres objetivos. El primero, a nivel político, es el cambio de las leyes que, aseguran, nada tienen que ver con la igualdad, ya que creen que la custodia de los niños, salvo casos muy específicos, debe ser compartida desde el primer momento: «No queremos las mismas horas, queremos los mismos derechos». El segundo, a nivel social, intentará sacar a la luz el drama de unos padres que se sienten «silenciados» y «estigmatizados», aunque, según Fernando, cada vez son más las personas que conocen esta realidad. «La mujer maltratada tiene que recibir ayuda. El hombre también», insiste. El tercer punto de su estrategia es la prevención a través de la mediación. «Si ves que tu matrimonio va mal, ven aquí y pide ayuda para intentar conseguir una ruptura ecuánime sin denuncias falsas de por medio», apunta antes de enumerar el Banco del Tiempo, el Banco de Ropa y una bolsa de trabajo como una de las prioridades de la asociación.

Hoy día de la mujer trabajadora, queremos felicitar a aquellas madres trabajadoras que no se han dejado llevar por el rol machista de custodia en exclusiva y han permitido la custodia compartida, permitiéndose de esta manera a si mismas integrarse en el mercado laboral.
Hoy, día de la mujer trabajadora, mas que nunca, Custodia Compartida.

Figura 1. Cartel de la mujer trabajadora

Nuestras hermanas, madres, tías, parejas… «no son lo que dicen -esas-» «a mi no me representan»